LO QUE DIJO LA PRENSA SOBRE EL ESPECTÁCULO "HISTORIAS DE TANGO"

“HISTORIAS DE TANGO”, OTRA HISTORIA QUE CONTAR.

Hay espectáculos que merecen ser destacados, por que son capaces de generar cierta cosa rara, que es difícil de nombrar, porque se siente,, y que te ganan una sonrisa, te arrancan un aplauso, y que quizá a más de uno, como en alguna que otra letra de tango, “le piantan un lagrimón”. En este tiempo donde se nos ha acostumbrado a consumir cierto “arte globalizado”, muchas veces procaz y salvaje, es justo que un simple espectador se tome el trabajo de agradecer esas “pequeñas joyitas” que nos conceden el beneficio de pensar, que no todo está tan echado a perder, y que artistas como estos, le devuelven la fe a los pueblos castigados por tanta “mediocridad heredada”.Sometido al bajo fondo de una voz arrabalera, por un rato, que se combinaba mágicamente con unas manos prodigiosas que despertaban notas con un esplendor casi místico, descubrí el tango desde otro lugar, de cerca, frente a frente, como ese mundo inagotable de historias, de malevos, minas, amores traicioneros y de los otros, los que trascienden la ficción de una letra para contar una de esas historias. Estas líneas pretenden, simplemente, destacar la belleza del espectáculo “Historias de Tango” dado el pasado viernes 30 de junio en el Teatro Municipal de la ciudad de Mercedes, por esa dupla escandalosamente brillante, integrada por Valeria Lima y Fernando Goicoechea. Potente, visceral, apasionada, vimos a una Valeria Lima derrochando talento y a un Fernando Goicoechea que sacudió las fibras más íntimas con una sensibilidad esencial. Aquel ensamblaje preciso, armonioso y dulce, brilló sobre un escenario que el público agradeció de pié. Esas “Historias de Tango” merecieron el aplauso obtenido, permitiendo conocer, admirar y disfrutar de ese par de artistas que logran dignificar y enaltecer la cultura de nuestro pueblo.

DIARIO CRÓNICAS-MERCEDES-SORIANO/julio de 2006

LIMA-GOICOECHEA: “HONRAR LA MÚSICA”

Nos permitimos parafrasear el “Honrar la vida” de Eladia Blázquez para dimensionar desde el título la riqueza y la excelencia de la propuesta que, a través de la idea “Historias de Tango”, brindaron la cancionista Valeria Lima y el pianista Fernando Goicoechea el pasado sábado 3 en el Florencio Sánchez.Generalmente se suele encarar un comentario tipo “acta” de lo que ocurrió, con lo que se logra esencialmente que quienes no asistieron se enteren de lo que se perdieron.Y aunque en realidad fue así, preferimos que nuestra opinión sobre este espectáculo apunte a lo genérico, sobre todo porque no somos especialistas en tango.”Historias de Tango” no se trata únicamente de artistas expresándose a través de una serie de interpretaciones. Es más que ello, porque hay un libreto, una médula, un hilo conductor. Algo así como la vida misma a través de letras de tango. Daniel Vidart en “El tango y su mundo” afirma que no existe un estilo de literatura tanguera en un concepto estricto, aunque encuentra “grupos” de letras, como las dramáticas, las líricas, las humorísticas, las amorosas (el tango sentimental), las que enfocan el tema social) y hasta las filosóficas, Valeria y Fernando logran el propósito de pintar la vida misma con historias que están en los propios textos tangueros.Desde la original entrada de los artistas por el fondo de la platea (Goicoechea tocando un pequeño acordeón) hasta ubicarse en el escenario y entregar un principio sin pausas, lo que continuó fue una criteriosa selección de tal manera que, sin desviarse de la médula del hilo, la variedad rítmica y temática doten al recital de un “climax” que no decae en ningún momento. Luego vendrían los diálogos, las acertadas introducciones a cada obra y hasta Goicoechea cantando… sin ser cantor (pidió permiso al público, para hacer vivir momentos a pleno, inclusive los jocosos, que la gente supo apreciar. Y mientras Valeria cambiaba vestuario, Fernando como solista instrumental se lucía en la milonga “Varón”.Así pasaron entre otros “Chiquilín de Bachín”, “Música de bandoneón”, “Malevaje”, “Volver” (cantado con el público), “Adiós Nonino” (según nuestra opinión, el punto más alto de Valeria), “La última Curda”, casi al final “Los pájaros Perdidos” y el extraordinario bis con “Honrar la vida” dedicado a la comunidad de ASDOPAY. Comentario aparte merece el instante para la mujer, invitándose a la platea a mencionar un tango con nombre de mujer, surgiendo también en Paysandú lo que ocurrió en toda la gira: “Malena”, indudablemente el que más se recuerda. Luego se mencionaría “Gricel”, que interpretarían con la historia de su autor, José María Contursi, protagonista de un “amor prohibido” pero con final feliz. “No todos los tangos tienen un final triste”, comentaría Valeria Lima.Voz maravillosa de la cancionista, natural, educada y excelentemente matizada para alcanzar una espléndida comunicación.Virtuosismo del pianista. Y ambos, al servicio de un camino de pentagramas con letras de tango para cantar historias de la vida. Un espectáculo poseedor de incuestionable valores.

DIARIO EL TELÉGRAFO-PAYSANDÚ-martes 6 de junio/2006

TANGO, SOLIDARIDAD Y MUCHOS APLAUSOS.

Espectacular presentación de Valeria Lima y Fernando Goicoechea en el Teatro Lavalleja.

“Historias de Tango” fue creado por los citados artistas en el año 2005, estrenado en el mes de setiembre, estando un mes en cartel en Teatro La Colmena, para ser luego presentado en diferentes escenarios como Carrasco Lawn Tennis, la sala Vaz Ferreira, el teatro Bastión del Carmen de Colonia, el hotel Barradas de Punta del Este y hotel Conrad Resort & Casino."

"...Valeria Lima y Fernando Goicoechea desplegaron una amplia gama de recursos artísticos para cautivar durante los 80 minutos que dura su actuación.La femenina forma de asumir el tango y de transitar el escenario por parte de la cantante generó una especie de imán irresistible que encuentra su complemento ideal en la calidad interpretativa del pianista que comparte el espectáculo, quien lejos de ceñirse pura y exclusivamente a ese rol, con sus intervenciones agrega más calidez al espectáculo.Es así que se recorren tangos, valses y milongas de todos los tiempos, tanto de la década del 20 y el 30 como del año 2000, pasando por autores como Gardel, Discépolo, Cobián, Troilo, Contursi así como Ferrer y Piazzolla, y por los uruguayos Bordoni y Goicoechea con sus obras actuales.En esta interacción que plantearon los artistas desde el comienzo, ingresando a la sala sorprendiendo al público, existen interesantes contrapuntos que son celebrados por los asistentes. Por ejemplo, Fernando Goicoechea establece que el hombre al protagonizar desilusiones, jamás llora sino que ruge en esos momentos de desesperanza. Por su parte Valeria Lima llama a la reflexión entorno a la utilización del término “mina”, antes utilizado en forma despectiva, inferiorizante, valoraciones que en su opinión han cambiado con el tiempo ya que “ahora nos quedamos contentas si nos dice minas, y si es flor de mina mejor aún”.Fernando Goicoechea también incursiona en el canto. “Por eso decimos que el espectáculo tiene fragmentos de humor”, anticipaba un par de días antes de la presentación en conferencia de prensa, y su estilo, en una parte del show es comparado por el del recordado Nino Bravo por la cantante.Tangos con nombre de mujer- María y Gricel entre otros, fueron intercalados con otras historias demostrando que el tango es mucho más que melancolía, dolor y amores no correspondidos. Cada letra de tango es como la vida, ni más ni menos, con protagonistas de carne y hueso que viven, gozan y sufren con el trazo del autor y la interpretación de los artistas.“Historias de Tango” es un encuentro mano a mano que se da entre estos dos artistas, que se han propuesto por sobre todas las cosas disfrutar cada vez que suben a un escenario y vibrar con cada una de las interpretaciones, dejando que surjan libres y acordes al espíritu de cada noche de cada público y de cada lugar”, decía la gacetilla de prensa enviada a nuestra redacción y vaya si los artistas lo cumplen arriba del escenario.Desde la platea, esa forma de sentir el tango se aprecia que es compartida por ambos de un modo natural, sin forzamientos ni estampas preconcebidas. Resulta evidente que disfrutan del espectáculo que realizan y eso redunda en que se trate de un show sin fisuras, sin altibajos, que mantiene un elevado nivel durante los 80 minutos que está en escena.“Honrar la vida”, de Eladia Blázquez, en la voz de Valeria Lima, significó la culminación más acorde que la jornada pudo tener. “Creciendo juntos” agradeció a los artistas los servicios prestados y del Teatro Lavalleja nos retiramos con la sensación de que las historias que nos contaron Valeria Lima y Fernando Goicoechea continúan flotando en el ambiente, esperando el momento justo para que la pluma adecuada las lleve a la eternidad en forma de tango.

SEMANARIO AREQUITA-MINAS-LAVALLEJA/mayo de 2006